La lógica no siempre es inocente:

Cuando era pequeña solía hablar con mi abuela de muchas cosas, en ese periodo tan especial de la vida en el que la socializacion aun no ha hecho los estragos como para hacer que dejemos de preguntar cosas lógicas e inocentes nacían en mi las dudas que construyeron poco a poco y de un modo de lo mas prolífico la base de mi pensamiento actual. Cada duda y cada pequeña reivindicación que solía hacer a mi abuela tenían siempre respuestas del estilo de: “Siempre ha sido así”, o, “eso es lo lógico en una mujer”. Con el paso de los años me di cuenta de que la inocente era yo y no una lógica creada para hacernos callar poco a poco.

Esa lógica en la que creyeron tantas mujeres ha sido impuesta desde una moral patriarcal, que ha hecho creer e ideas del bien y el mal polarizando así la vida femenina ya que en nuestra vida, para muchos y muchas aun hoy en día no existe el termino medio, o hacemos cosas “bien” o las hacemos “mal”, tal vez los conceptos de bien y mal quedan disfrazados bajo los de “mujer normal” el caso es que sean cuales sean nos obligan a creen en una falsa lógica que constituye todo nuestro ser como mujeres.

Y es que a las mujeres se las ve primero mujeres y después humanos durante muchos siglos, ese es a su vez el germen y el resultado del sistema de dominación patriarcal y de muchos otros sistemas de dominación, en el que primero se ve a un grupo, raza o etnia como grupo, raza o etnia y finalmente...si cabe...se le ve como conjunto de seres humanos.

Es necesario ejercitar una lógica feminista, que no sea binaria, que no crea solamente en los polos, que refleje la realidad y no un imaginario.
Sigo recordando aquellos años de inocencia en los cuales mi abuela creía que con mis reivindicaciones no decía que las mujeres eran iguales a los hombres sino que se pensaba que para mi las mujeres debían ser hombres, en eso resumen muchas personas el feminismo, pero para mi es sin lugar a dudas la única teoría que quiere lograr la igualdad a través de la diferencia.